Venezuela recupera a su arma principal, su lanza, su primer
centauro. Salomón Rondón regresa al once inicial de la Vinotinto, luego de
cumplir una fecha de sanción, para enfrentar a Uruguay en una batalla casi
decisiva por un cupo en el Mundial de Brasil 2014.
Ausente en el empate a uno ante Bolivia en La Paz -cuánta falta
hizo su tino frente al arco-, Rondón se preparó en Ciudad Guayana para
enfrentar a Edinson Cavani, Diego Forlán y compañía. El escuadrón patrio es
quinto, con 16 unidades, y lucha por deshacerse de un rival directo, que cuenta
con 13.
“Las expectativas son las mismas de
siempre”, señaló Salo, en la atención a la prensa en Puerto Ordaz. “Va a ser un
partido difícil, complicado, nosotros tenemos la posibilidad de sumar un
triunfo y dejarlos a seis puntos en la tabla”.
¿Cómo se debe afrontar este duelo
frente a la celeste? “Como siempre, todos los partidos de eliminatorias son
complicados, de mucho contacto. Uno está allí para eso, para afrontar al que se
te pare al frente”, considera el caraqueño. “La clave de siempre, no tenemos
que cambiar nada de lo que venimos haciendo, estamos haciendo las cosas muy
bien. Debemos seguir en ese camino”.
“A pesar de que en Puerto Ordaz hace
bastante humedad, y que Uruguay viene de descanso, vendrá también completa físicamente, como
nosotros, a pesar del partido en La Paz. Este partido será de mucho desgaste”.
Rondón viene de una campaña más que positiva. Con el Rubin Kazán,
en su primer año con el conjunto tártaro, sumó doce goles, siete en la Premier
League rusa y cinco en la Europa League. Su primera incursión en un torneo
continental terminó en la semifinal, perdida ante el ganador, el poderoso
Chelsea inglés.
Con la selección venezolana su momento también es brillante. Sus
goles han mantenido a la Vinotinto en los primeros cinco puestos de la
clasificación mundialista, a falta de cuatro fechas para el final. Con solo 23
años se ha erigido como uno de los grandes artilleros de Suramérica.
Rondón anotó ante Uruguay en Montevideo (1-1), dos dianas contra
Paraguay en Asunción (2-0) y una ante Colombia en Puerto Ordaz (1-0). Sus
festejos, dedicados a su pequeño Rodrigo y a su cálida familia, le dieron a
Venezuela siete puntos de los 16 que lleva, fundamentales para ir al primer
Mundial en la historia nacional.
“Lo que siempre ha caracterizado a
Uruguay es su garra”, analiza el delantero. “Son jugadores fuertes, pero
nosotros también lo somos, somos jugadores que nos desgastamos en el campo.
Será un partido de mucho desgaste y contacto”.
Mañana (7:30 pm, transmisión de Meridiano TV, TVes y DirecTV
Sports), se volverá a ver con la celeste. En el mítico estadio Centenario, el 2
de junio de 2012, anotó el gol del empate que hizo vibrar a toda una nación. En
la tarde montevideana apareció "El Gladiador" para silenciar al
coloso charrúa, campeón de América en el 2011 y cuarto en el Mundial de
Suráfrica 2010.
La selección uruguaya, aunque no contará con el terrible Luis
Suárez (hombre del Liverpool inglés, autor de 23 goles en la Premier, cuatro en
la Europa League y ocho en el premundial) por acumulación de tarjetas, y de
venir en horas bajas (es séptimo en el camino a Brasil), llega con ánimo de un
triunfo que le devuelva el alma y el orgullo.
Pero al frente estará el hombre de
Catia, primera lanza de la Vinotinto y cosaco en las estepas rusas. “La
clasificación pasa por ganar en casa”, sentencia, “sabiendo que la selección
está bien, que tenemos que dejar los tres puntos sí o sí”. Tras Uruguay, en
tierras venezolanas combatirán Perú en septiembre y Paraguay en octubre. La
Vinotinto visitará a Chile, también en septiembre.
No estará fácil sacarle un punto a la selección venezolana con Rondón en el campo de batalla.
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