Lo de Venezuela es de una necesidad urgente, extrema. Dos
derrotas consecutivas encienden las alarmas en el equipo criollo, en su
búsqueda por un cupo al Mundial de Brasil 2014. Y al frente tendrán a un rival
durísimo, por la octava jornada de las eliminatorias: Paraguay en Asunción.
La Vinotinto tiene que salir como leones en la jungla.
El compromiso perdido en Lima ante Perú por 2-1 (gol de Juan
Arango por dos de Jefferson Farfán) hirió a los criollos, más por la
circunstancia que por la derrota en sí. Venezuela iba ganando al término del
primer tiempo con el tanto del capitán, pero se hundió en doce minutos de
temblor, con las dos dianas de “La Foquita”. El orden del que nos ufanamos
desapareció casi por completo, y todo pudo ser peor.
Pero la de este martes (6:55 de la tarde) será otra
historia. Debe serlo, aunque el escenario sea aún más complicado. Los
nacionales visitan el estadio Defensores del Chaco sin Gabriel Cichero,
expulsado ante Perú por doble amonestación, y con los números en contra: nunca
han podido siquiera anotar un gol en la capital guaraní. Cinco duelos saldados
por fallos en eliminatorias preocupan a los de César Farías.
Además el equipo de Gerardo Pelusso llega dolido. Cayó 3-1 ante
Argentina en la pasada fecha y es último del premundial, con apenas cuatro
puntos. Hasta Bolivia y Perú están por encima de los albirrojos, subcampeones
de la Copa América 2011.
Probablemente el equipo de Farías repita el sistema de juego
implantado en la capital peruana, con cuatro defensores en labor netamente de
cierre, dos volantes de contención, tres de ataque y un punta. El problema está
en los nombres.
La primera gran duda es quién suplirá a Cichero. Se presume
que Rolf Feltscher, titular por la derecha ante la escuadra inca, pase a la
izquierda, y que Roberto Rosales, que actuó como volante de ataque el viernes,
baje a su posición habitual en la banda diestra. En defecto de Feltscher, Ruberth Quijada se encuentra a la espera de su oportunidad.
Los centrales repetirían, con Oswaldo Vizcarrondo –respetado
tras su paso por el Olimpia paraguayo- y Andrés Túñez tratando de dejar el arco
de Renny Vega en blanco.
Para Vizcarrondo Paraguay “es una selección que necesita de
puntos como nosotros. Vamos con todo. La clave está en lo grupal, nosotros
tenemos poco volumen de juego en la parte de adelante, pero tratamos de
priorizar lo colectivo sobre lo individual”.
Otra de las áreas que es una interrogante es la contención.
El primer tiempo de Ágnel y Francisco Flores en Lima fue positivo, pero para la
segunda mitad no pudieron aguantar las embestidas de la albirroja. Quizá sea el
momento para que Franklin Lucena y José Manuel Velázquez, la dupla que puso el
orden del segundo tiempo en el empate a uno contra Japón, armen la barricada en
el medio.
En el frente las cosas lucen un poco más claras. Juan
Arango, su pierna zurda y su liderazgo son insustituibles en el equipo. Luis
Manuel Seijas lució con fuerza en Perú. El problema está en quién sustituye a
Rosales si éste termina como defensa por la izquierda: la experiencia de César
“Maestrico” González o la velocidad de Alexander González están a la orden.
“Paraguay será un rival difícil, que le gusta mucho el juego
físico, pero nosotros estamos preparados para todo tipo de compromisos”, señaló
Seijas.
De Farías continuar con su política de alternar delanteros,
Salomón Rondón debería ser titular ante los guaraníes. Su físico y su
resistencia le favorecen por encima de “Miku” Fedor, que contra los peruanos no
logró aparecer a plenitud.
“Tenemos que aprovechar las oportunidades que tengamos”, señaló
Rondón. “Me siento bastante bien, estoy bastante tranquilo. Trabajaremos para
sacar un buen resultado”.
El balón parado, arma favorita de los paraguayos, es también
dominado por Venezuela. Los locales lo sufrieron, cuando en el último duelo de
la fase de grupos (3-3) Grenddy Perozo puso la igualdad para los criollos. La
batalla aérea en Asunción está planteada y la Vinotinto se tiene confianza,
sobre todo con arietes como Vizcarrondo y ejecutores como Arango.
La única baja segura de Paraguay es la de Iván Piris por
amonestación. De resto, Pelusso podría repetir buena parte del equipo que cayó
frente a los argentinos el viernes. A destacar por el cuadro guaraní están el
mejor arquero de la Copa América 2011, Justo Villar; el zaguero Antolín Alcaraz
y el delantero Roque Santa Cruz.
La gran preocupación del
técnico nacido en Uruguay es la generación de juego. Si Marcelo
Estigarribia y Jonathan Fabbro aparecen, Venezuela debe estar más que pendiente
en defensa.
El tema principal pasa por la actitud y el orden. Venezuela
lo sabe, y está dispuesta a dar la sorpresa en la selva paraguaya.
El dato
Venezuela nunca ha podido vencer a Paraguay como visitante
en la historia de las eliminatorias. Los nacionales han visitado Asunción en
cinco ocasiones, saliendo perdedora en igual oportunidades. En tres de esas
ocasiones los guaraníes han ganado 1-0, una por 2-0 y otra por 3-0: nunca ha
podido siquiera festejar un gol.
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