“Le doy gracias a Dios por este nuevo partido, por poder jugar el partido completo. Las cosas no nos salieron bien, pero en lo personal hice un buen partido”, señaló el atacante a PANORAMA, vía telefónica desde Alemania.
Un primer tiempo algo amarrado le dio paso a uno más suelto, con mayor libertad para atacar.
“En el primer tiempo las cosas me estaban saliendo bien, me esforcé mucho para darle pases a mis compañeros para gol, y tuve una ocasión de gol, pero no pude marcar. En el segundo tiempo me sentí más suelto, con más confianza, encaraba, y eso es lo que me gusta. Espero poder volver a ser convocado”, insistió.
Wolfsburgo está en el puesto ocho, con 27 puntos. Schalke es cuarto, con 44 unidades.
“Los partidos siempre son así. A veces son fallas en la defensa, en el mediocampo o la delantera. Somos un grupo, todos luchamos para ganar”, recalcó el marabino, que jugó con el dorsal 30 de los verdiblancos.
Klaas Jan Huntelaar metió dos y Joel Matip uno, mientras que el legendario ex jugador del Real Madrid, el español Raúl González Blanco, metió su gol 400 en su carrera, sumando selección y clubes.
Orozco también tuvo palabras sobre su encuentro en el campo con el “7” ibérico: “Era algo que siempre había soñado. Los sueños se me van haciendo realidad poco a poco. Pude conocerlo y jugar contra él”.
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