Páez sigue rompiendo cadenas

Cortesía El Tiempo de Bogotá
El padre de la Vinotinto, el que ayudó a dar los iniciales pasos ganadores a la selección nacional, el primero en dirigir en el exterior...  continúa rompiendo cadenas. Richard Páez Monzón se convirtió, anoche, en el primer técnico criollo en coronarse en el exterior, guiando a Millonarios de Bogotá al título de la Copa Postobón Colombia.

Los embajadores, con el merideño al mando y con el caraqueño Alejandro Cichero como central titular, vencieron 1-0 (global 2-0) al Boyacá Chicó en la final del torneo copero, celebrada anoche en el estadio Nemesio Camacho, “El Campín”, de Bogotá.


“Esto es un triunfo de los jugadores”, alcanzó a decir el ex seleccionador nacional, que se fundió en los festejos con su grupo. “A mí siempre me ha tocado complicado, venir de abajo. En Estudiantes (de Mérida), la selección (venezolana), y se transformó la historia con trabajo”, recordó el andino, criticado al principio de la campaña por el rendimiento irregular del equipo.

Páez además estuvo acompañado por su preparador físico, el también merideño Jorge Durán.
Los azules capitalinos ganaron con un gol de Mayer Candelo, al minuto 84 del compromiso. En la ida vencieron también por idéntico marcador, con tanto de Rafael Robayo.  Ante más de 40 mil espectadores, ansiosos por ver a Millonarios coronarse diez años después de sus últimos fuegos artificiales, cuando obtuvo la desaparecida Copa Merconorte.

Candelo tuvo su reivindicación, luego de fallar un penal en el compromiso, de aprovechar un error de la zaga ajedrezada, para sellar la victoria del cuadro bogotano.

Cichero, que trabajó los 90 minutos del duelo, terminó con la bandera venezolana colgada como capa. Posteriormente se unió con su hermano Gabriel -suspendido en Francia por una trifulca- en la alegría.

“Esto se lo dedico a mi familia, a Dios. El que está con Dios siempre gana”, señaló el experimentado central, que ya había salido campeón en Uruguay y en China. “A nosotros (los venezolanos) en el fútbol nos cuesta un poco más, por eso siento orgullo de representar a Venezuela”.

La coronación de los embajadores les da el pase a la Copa Suramericana 2012, amén de convertirse en la resurrección de un gigante que parecía muerto. ¿Y quién lo redimió? Un doctor de apellido Páez, acento merideño y temple de acero.

Sin celebración
El zuliano  Grenddy Perozo, ficha del Boyacá Chicó subcampeón de la Copa Postobón Colombia, se mantiene en su proceso de recuperación luego de la lesión sufrida en la Copa América Argentina 2011.

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