¿Barcelona en Venezuela?

Es el equipo de moda en el planeta fútbol. No solo golea, sino que tiene estilo para ganar, es fiel a sus principios de toque de balón, de generosidad, de belleza e inteligencia. En lo extradeportivo, tiene un técnico humilde, Pep Guardiola, que no habla más de lo debido y que es sinónimo de buen gusto, y unos jugadores conocidos por su disciplina (pocos se ven en fiestas o parrandas, como antaño) y por su sencillez. Sin duda alguna, el FC Barcelona ya se ha hecho un espacio en el imaginario popular como el equipo más cercano a la perfección, dentro y fuera del campo.

Su demostración de poderío sobre su eterno rival, el  Madrid, el pasado lunes, hizo realidad la utopía de que se puede ganar a cualquier gigante  jugando de una gran forma. Cinco goles, cinco obras de arte, colmaron las graderías y tribunas del Camp Nou y  cada una de las pantallas de televisión en el mundo.

Tanto arte no escapa de ser copiado, o por lo menos de intentar copiarse. Venezuela, por ejemplo, intentó utilizar el 4-3-3 clásico de los catalanes, pero su resultado fue infructuoso: el chip del jugador vinotinto es el del 4-2-2-2, y la calidad de los jugadores culés está lejos de la realidad, combativa y de garra, de nuestros futbolistas nacionales.

¿Es posible imitar el estilo del Barcelona? ¿Se imaginan, por un momento, que algún club venezolano intente parecerse al de la Ciudad Condal? ¿Qué sería necesario?

Primero, tradición. El Barcelona cumplió, el día de la goleada, 111 años: se hizo uno con la catalanidad, convirtiéndose en el “brazo no armado” de la entidad. Más de 175 mil socios, más aficionados en todo el mundo, se identifican con los colores azul y grana.

Organización. El equipo, desde 1899, pasó de ser un equipo pequeño a una institución, con manejos de empresa, que rinde réditos para sus socios. Se escoge un presidente que rige los destinos del gigante: si lo hace bien, se mantiene. Si no, se va. No hay aportes de entes públicos, salvo del bolsillo de los amantes del club.

Desarrollo en infraestructuras. La Masía, lugar donde se forman los canteranos; el centro de entrenamiento Joan Gamper, en Sant Joan Despí, en las afueras de la capital condal, para realizar las prácticas; y el Camp Nou, el coloso, el teatro de la historia blaugrana, propiedad del club.  Son las tres principales edificaciones que maneja el equipo de fútbol, sin contar las secciones de otros deportes.

Jugadores de calidad. Lo más difícil de conseguir, no solo porque cuestan dinero, sino porque su formación es continua: se produce un Víctor Muñoz, aparece un Guardiola; se retira Guardiola, entra Xavi; y así sucesivamente. Hay una marca registrada, un signo permanente en cada jugador. 

¿Es posible tener a un Barcelona en Venezuela? Parece que hay que seguir soñando.

Comentarios

  1. DIFICIL PERO NO IMPOSIBLE:
    seria un honor que un equipo venezolano tenga aunque sea un estilo de juego similar.. cosa que cuesta mucho xq no hay equipo sudamericano que tenga uno igual al del barsa.. yo pienso si estuviera en la posicion no de el tecnico de un club si no de la seleccion del pais.. hacer lo que en estos momentos hace diego armando maradona que esta 1 mes en los entrenamientos del madrid para sacar tecnicas.. cuidate!!

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