Portugal, con el alma en vilo (Portugal 2-2 Estados Unidos)

En la última jornada del grupo G para Portugal, parece que la Virgen de Fátima tendrá que meter su mano. El domingo, un cabezazo de Silvestre Varela tras un centro de Cristiano Ronaldo en el minuto 90+5 le dio el empate a los lusos frente a Estados Unidos: para avanzar a octavos de final del Mundial de Brasil  2014 están a nivel de milagro.



 Los norteamericanos dominaron, jugaron a placer, aplastaron físicamente a los europeos. Pero les faltó marcar más, mantener el resultado a favor. Ganaban 2-1 al término del reglamentario, con tantos de Jermaine Jones y Clint Dempsey, que remontaron el gol tempranero de Nani.

 El árbitro argentino Néstor Pitana dio cinco minutos de reposición -ya parece un intento de tabla de salvación de la Fifa para los equipos mediáticos- y, al quinto minuto, surgió  Varela para cabecear y meter el 2-2.

Un hilo de vida le queda a los lusitanos en el grupo G: golear a la portentosa Ghana y ligar a que Alemania derrote a Estados Unidos en la fecha final, que se disputa el 26 de junio. Pero, de igualar germanos y norteamericanos, tanto los africanos como los portugueses dirán adiós a la copa.

Disminuido  con la suspensión de   Pepe y  los problemas físicos de Bruno Alves y Postiga, Portugal   tuvo la suerte de cara en el primer tiempo. Geoff Cameron despejó mal un balón y la pelota le quedó a bocajarro a Nani, que metió el zapatazo dentro del área apenas al  5’.

  Al 13, Dempsey  envió un tiro libre por encima del arco de Beto; cuatro minutos más tarde enviaría un tiro cruzado; al 27 se lanzó una individual, llevándose a dos marcadores, pero la pelota fue al córner. El “8” era un huracán.

Michael   Bradley, camiseta 4, no se quedó atrás. Un zurdazo sobre el travesaño de Beto al minuto 24 y un tiro mordido cuatro minutos más tarde hicieron temblar a los portugueses.

Cristiano Ronaldo contó con pocas ocasiones. El “Balón de Oro”, más ganas que efectividad, empleó dos zapatazos de media distancia que fueron, el primero detenido por Tim Howard, y el segundo un tiro libre con destino a la tribuna del estadio Amazonia de Manaos. Así avanzó durante todo el duelo.

El arco gringo fue salvado extraordinariamente por Howard al 45, luego de un tiro de Nani que pegó en el poste derecho: el rebote le quedó a Eder, que bombeó la pelota, sacada por el meta norteamericano.

En el complemento, y tras un toma y dame de película en el que los norteamericanos dominaron, contragolpeando los portugueses, Jones empató (64’) con un derechazo soberbio en las cercanías del área rival. Al  81’, Dempsey recibió un centro de Graham Zusi para empujar, con el abdomen, para el 2-1.

Cristiano reapareció: centró y  allí estaba Varela, para darle una última oportunidad a Portugal.

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