El timonel, de 67 años, que estuvo como entrenador de arqueros en el Estrella Roja de Belgrado campeón de Europa en 1991, trabajó con Myanmar y China en copa de Asia y llevó a Ghana al Mundial de Alemania 2006, conversó con PANORAMA sobre su opción para regresar al equipo nacional.
También rememoró su paso por el desaparecido Atlético Zulia, club con el que ganó la estrella de la temporada 1997-1998.
¿Cómo toma su inclusión entre los seleccionables para dirigir a la Vinotinto?
Estoy muy orgulloso de estar entre los candidatos para hacerme cargo de la selección de Venezuela. Venezuela es mi otra patria. Casi todos los años vengo, paso dos o tres meses, dependiendo de mis obligaciones. Para mí, sería un orgullo llevar esa selección de nuevo.
¿En cuánto ha cambiado el fútbol venezolano y la selección nacional desde que usted estuvo en los 90?
Aunque no estoy al día, porque no sigo la liga venezolana ni tampoco pude ver todos los partidos de eliminatorias o amistoso, pero es muy distinto, por supuesto. Ha avanzado mucho. Cuando empezamos, nosotros teníamos dos jugadores jugando fuera: Stalin Rivas en Bélgica y Gaby Urdaneta en Suiza. Hoy día, de los 40 que han jugado para la selección en esta eliminatoria, solamente unos están jugando en Venezuela, los demás afuera, con equipos fuertes y técnicos de primer nivel. Se nota una diferencia muy buena, notable.
¿Cómo fueron las conversaciones con la Federación Venezolana de Fútbol?
Unos directivos y yo hablamos, intercambiamos ideas sobre lo que se puede hacer. Me preguntaron si quería estar al frente de la selección y yo dije que sí. Ellos me presentaron sus ideas, yo pregunté el manejo y esas cosas. No se habló nada en concreto. Me han dicho que tienen otros candidatos, que quieren hablar con ellos y poner sobre la mesa los currículos de cada uno y discutir, porque la directiva en la Federación está dividida sobre eso. Unos están con Ratomir, otros con Richard Páez, otros con otro DT extranjero. Pero me dicen que el país está en una situación muy grave hablando de dólares, y traer a un extranjero va a ser muy difícil para ellos. No puse condiciones, solo pregunté si había posibilidades de traer técnicos de Serbia, parte de mi cuerpo técnico. No se descartó nada.
¿Qué le entusiasma de esta Vinotinto?
Esta selección tiene unos jugadores de primer nivel. Lamento que no se clasificaron, pero veo que hay posibilidades de clasificar si me hago cargo. Pero hay que reconocer que hay jugadores de más de 30 años que no podrían llegar a la próxima copa del mundo. Hay muchos jugadores que pueden dar mucho más. Con una disciplina táctica y trabajo se puede lograr algo importante.
¿Cuáles son sus peticiones para asumir a la Vinotinto?
Deseo hacerme cargo de la selección, pero hay cosas que debo arreglar antes de eso. No se trata solo de firmar contrato. Necesito viajar a ver a los jugadores en Europa, ver los partidos en Venezuela. Hay que esperar. Me da mucha satisfacción estar entre los candidatos.
Una de las dos estrellas que tiene Maracaibo fue con usted, dirigiendo al Atlético Zulia. ¿Qué recuerdos tiene de esa etapa?
Las memorias más lindas las llevo de Maracaibo. Cuando hablo con mi familia nos recordamos del buen tiempo que pasamos allá. En nuestra intimidad queríamos que alguien nos llamara de nuevo para hacerme cargo del Zulia, pero el señor (Marcelo) Bortolussi no quiere saber más nada del fútbol.
En lo futbolístico, ¿cómo evalúa al “Equipo Gallo” que usted condujo?
Era un gran equipo, con jugadores de primera fila, los mejores que hemos tenido en aquella época en Venezuela, ganamos la mayoría de los partidos en casa y bastante a fuera. Urdaneta, Ruberth Morán, Juan García, Dudamel, Sanhouse, McIntosh, que todavía está jugando, Tortolero… teníamos un equipazo. Era satisfactorio trabajar con ellos.
Su gran carta de presentación para volver a la Vinotinto es la clasificación al Mundial de 2006 con Ghana. ¿Cuál fue la clave de aquella selección?
Nosotros hemos logrado eso gracias a un grupo de jugadores que tuvimos en Ghana, pero lamentablemente no tenían un técnico que pudiese sacar más del equipo. Me contactaron y cuando llegué no perdimos ningún partido, ganamos todos, solo empatamos contra el Congo, y así clasificamos por primera vez. Hicieron una gran fiesta. Se jugó muy bien. Estábamos en la Copa del Mundo como un equipo muy bueno. Dimos una impresión diferente al resto de los equipos africanos.
Contó con el venezolano José Alí Cañas asistiéndole en el combinado ghanés. ¿Cómo es el vínculo con el merideño?
Aparte que es una persona muy buena, maravillosa, es una persona de mi confianza. El técnico que conoce el fútbol de hoy, siempre está al día de cómo se desarrolla el fútbol. Es un trabajador. Me ayudó mucho, muchísimo, sobre todo en lo defensivo. Maneja eso muy bien. Estamos en contacto desde la primera época en la que vine a Venezuela. Conversamos dos, tres veces por mes, todos estos años.
Comentarios
Publicar un comentario